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Información útil sobre termos y calentadores de agua para tu hogar
Algunas viviendas de España, todavía no cuentan con sistema energético para climatizar el domicilio y calentar el agua resulta un inconveniente. Lo mismo sucede en pisos o casas pequeñas, pero cuando se está llevando a cabo una rehabilitación o reforma, es posible prever esta situación.
Surge entonces la alternativa de conectar la red de gas, para conseguir que la vivienda tenga agua caliente y también calefacción. Para que el propietario tenga conocimiento sobre el estado del piso, casa o chalet y pueda realizar la reforma de su baño o rehabilitación de su vivienda, nada mejor que la opinión experta de los arquitectos y constructores o empresas de reformas. Se necesitará un estudio, sobre el consumo que se puede tener después de la reforma. Si solamente interesa al dueño o inquilino calentar el agua, hay dos alternativas:
Calentadores a gas
Presenta un funcionamiento simple para calentar el agua, que pasa a través de un serpentín. El mecanismo se enciende cuando pasa por los fuegos y calienta el agua al abrir el grifo.
Su principal ventaja, es que produce calentamiento de forma inmediata, permitiendo utilizar el agua caliente sin limitación alguna. Por otra parte el consumo de gas, siempre será más económico que la electricidad, esto en caso de disponer de conexión a la red de gas natural. Si no existe dicha conexión y se emplean para el suministro bombonas de gas butano, se requiere la permanente reposición de las mismas.
También puede suceder, que si disminuye la cantidad de agua que pasa por el calentador a gas, baja la temperatura enfriándose. Las revisiones deben ser frecuentes, por el peligro que conlleva el calentador, cuando tiene un nivel inadecuado de combustión.
Termos eléctricos
Este aparato que tiene la propiedad de calentar el agua y mantenerla en una reserva de agua caliente constante, dispone de un depósito de agua con dimensiones que varían entre 50 a 100 litros. Cuenta con resistencia eléctrica, que al ser conectada a la corriente eléctrica logra calentar el agua, que se encuentra en el tanque o depósito, evitando que baje la temperatura, porque su aislamiento es mayor.
Gracias al termostato se puede controlar el calentamiento, en el momento que se enfría el agua se vuelve a encender la resistencia interna para mantenerla caliente, sin necesidad de abrir o no el grifo, como en los calentadores a gas. Utilizados comúnmente en pisos o viviendas de pocos metros cuadrados, ya que cuando se consume el agua tarda en reponerse.
En caso de optar durante la reforma o rehabilitación por tanques de 50 litros, se puede camuflar la instalación en la cocina con facilidad. Si la capacidad es mayor, se requiere más espacio en la propiedad. Los termos eléctricos de menor tamaño, tienen autonomía para dos duchas, y aumentan de acuerdo a la capacidad del aparato.
La mejor alternativa dependerá de la vivienda en particular, así como de la necesidad del propietario. En lugares pequeños el termo eléctrico es una ventaja, no así en viviendas con varias personas, donde un calentador a gas puede resultar más útil, evitando la falta de agua de los termos porque el consumo es mayor.
