Obviamente todos sabemos qué es una instalación eléctrica y la usamos a diario en nuestra vivienda. Sin embargo, no sabemos qué partes o elementos tiene, ni que existen diferentes tipos.
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¿Qué es una instalación eléctrica?
La instalación eléctrica doméstica es un conjunto de elementos que permiten el suministro y distribución de energía eléctrica desde la acometida general hasta los puntos que requieran de electricidad para funcionar.
Todos los inmuebles con instalación eléctrica deberán pasar por fases diferentes, exactamente dos:
- Instalación de enlace: Son las conexiones eléctricas que dirigen la electricidad desde fuera del inmueble o acometida de suministro de las compañías eléctricas, hasta el cuadro que se encuentra dentro la casa.
Tienen diferentes partes:
- Línea de acometida.
- Línea repartidora.
- Centralización de contadores.
- Derivaciones individuales.
- Interruptor de control de potencia.
- Cuadro general de mando y protección.
- Tima tierra del edificio.
- Línea de acometida.
- Instalación eléctrica interior: Es el punto por el que sale la energía eléctrica cuando ya está dentro del inmueble. Lo que viene a ser la conexión eléctrica de la línea de derivación individual al diferencial, o interruptor de control de potencia, es el punto de partida en la instalación interior de un piso. Suele localizarse en la entrada de la vivienda y de él partes los diferentes circuitos de la vivienda. Aquí también encontramos los dispositivos de protección y seguridad de la casa.
Dentro del cuadro aparecen diferentes tipos de interruptores:
- De Control de Potencia, (ICP), o Limitador
- General, (IG)
- Diferencial, (ID)
- Pequeños interruptores automáticos, (PIAS)
¿Cómo suelen ser las instalaciones en los hogares?
Dentro de un inmueble la instalación de electricidad suele ser de unos ciento sesenta metros, más o menos, y suelen estar formadas por unos cinco circuitos independientes a los que se añaden otras extras. Las cinco partes normales de una instalación eléctrica doméstica suelen ser las siguientes:
C1 – Alumbrado, para alimentar todos los puntos de luz.
C2 – Para alimentar tomas de corriente de uso general y frigorífico.
C3 – Para alimentar tomas de corriente de cocina y horno.
C4 – Para alimentar la lavadora, el lavavajillas y el calentador eléctrico.
C5 – Para alimentar enchufes de baños y auxiliares de cocina.
Diferencias entre una instalación monofásica y una trifásica
Su principal diferencia es el número de fases, es decir, su manera de producir, distribuir y consumir la electricidad.
En las instalaciones monofásicas solo se cuenta con una fase, mientras que en las trifásicas hay tres.
También varía el voltaje. En una trifásica irá de 380 a 400 voltios y en una monofásica de 220 a 230 voltios.
¿Qué es una instalación monofásica?
Es aquella donde la producción, distribución y consumo de energía eléctrica que se ha creado gracias a una sola corriente alterna o una fase.
- Es la más común a nivel doméstico.
- Posee potencias normalizadas que van de 1,15 kw en adelante (siempre múltiplos de eso)
- Para saber qué tipo de instalación poseo, puedo ir al cuadro eléctrico y ver si las pletinas son dobles. En este caso, tu instalación es monofásica.
¿Qué es una instalación trifásica?
Una instalación trifásica es aquella en la que la producción, distribución y uso se da en tres fases.
Sus características suelen ser:
- Suelen encontrarse en edificios comerciales y en hogares antiguos. Sus tensiones normalizadas están entre 380 o 400 voltios.
- Para ver si este es mi tipo de instalación, deberé ir al cuadro eléctrico y ver si poseo un interruptor triple.
Si bien este tipo de instalaciones es adecuada para empresas, a nivel de vivienda puede ser sinónimo de pagar más en la factura, por ello puedes plantearte cambiar de una potencia trifásica a una monofásica.